La Conselleria de Cultura por fin se ha pronunciado sobre la reclamación del Ayuntamiento de Benicàssim, con la unanimidad de todos los grupos políticos, para que haga frente cuanto antes al pago de la deuda de 1,4 millones que mantiene desde hace ocho años con el consistorio. El conseller de este departamento, Vicent Marzà, ha asegurado que asumirán los impagos, pese a no ser responsables de ellos, ya que se remontan al Gobierno del PP.

“Hablaremos con el Ayuntamiento para trabajar conjuntamente y que la ciudadanía disfrute de Villa Elisa”, señaló ayer Marzà, con motivo de una visita que realizó a l’Alcora.

De todos modos, el máximo responsable autonómico de Cultura se ha mostrado molesto con la actitud reivindicativa que ahora abandera la alcaldesa, Susana Marqués, después de estar tantos años sin exigir el pago de la deuda a sus compañeros de partido. “Podía haber reclamado al anterior Gobierno con más fuerza el débito que tenía con Benicàssim. Si el PP hubiera tenido voluntad política de hacer frente a esta cuantía, lo hubiera hecho a través de las actuaciones plurianuales para proyectos culturales, que suman 42 millones de euros”, recalcó Marzà, quien lamentó la “poca coherencia” de Marqués.

cerrada // El pronunciamiento del conseller llega después de que el Ayuntamiento haya amagado con llevar el asunto a los tribunales si no se fija un calendario de ingresos y se presupuesta para el 2017 la cantidad que resta para completar las obras de rehabilitación de este emblemático inmueble, tras ocho años paralizadas. La falta de una solución clara para Villa Elisa mantiene este palacete cerrado, pese al interés de diversas universidades de poder realizar allí cursos de verano. H