El conseller de Vivienda, Rubén Martínez Dalmau, mostró ayer su compromiso de acelerar los trámites que permitan el derribo del edificio 167 de la avenida José Ortiz, más conocido como Grupo B, y a hacerlo efectivo el próximo año. «En el 2020 se pondrá fin a la problemática», aseguró el responsable del área en su comparecencia en la comisión de Les Corts para informar sobre la situación del inmueble, a petición del grupo del Partido Popular.

Mostró su satisfacción «por la solución a un problema que se ha perpetuado en el tiempo durante cuatro legislaturas». «Así se lo he trasladado también a la alcaldesa, Merche Galí, consciente de la preocupación que ha generado entre el vecindario. Por fin, el edificio será derrocado el próximo ejercicio», añadió el conseller.

Martínez Dalmau desgranó el proyecto de demolición que guiará los trabajos y que saldrá a licitación con cargo a las cuentas autonómicas. Hace unas semanas informó a la primera edila y a la concejala de Territorio, Carmina Martinavarro, que se reservaban 354.000 euros en las cuentas de la Generalitat del 2020 para el proyecto. Finalmente, como confirmó ayer Dalmau, la partida se fija en 363.000 euros.

El responsable de Vivienda señaló que, una vez efectuado el derribo, Conselleria y Ayuntamiento trabajarán de forma conjunta para buscar una utilidad al solar resultante. Y aseguró que se tendrá en cuenta la opinión de las personas que viven en el barrio.

Por su parte, el diputado del PP Luis Martínez lamentó en la comisión que la anterior consellera, María José Salvador, y Galí «jugaron con la voluntad de los vecinos» al anunciar el derribo sin reserva presupuestaria.