Dentro del pacto de reconstrucción Tots per Onda, que tiene una inversión de 6,3 millones de euros para luchar contra la crisis del coronavirus, el Ayuntamiento constituyó este miércoles la mesa social de la ciudad junto a Cáritas Interparroquial, Cruz Roja y la oenegé Quisqueya, con el objetivo de coordinar todas las entidades y mejorar los servicios sociales que todas ellas prestan a las familias más vulnerables.

Así, en la primera reunión de este órgano, presidida de forma telemática por la alcaldesa, Carmina Ballester, y el edil de Bienestar Social, Óscar Valero, todos los representantes acordaron, entre otros puntos, la necesidad de crear una plataforma tecnológica común donde registren los casos derivados de Servicios Sociales y puedan compartir información, gestionar las ayudas y trabajar de forma coordinada con tal de optimizar los recursos entre todas las oenegés.

Además, también estudiarán la posibilidad de poner en marcha un sistema de tarjeta monedero para que los beneficiarios de las ayudas puedan comprar con ella los productos básicos en los supermercados.

Reunión "útil" y "necesaria"

Ballester calificó este primer encuentro de la mesa social de Onda de «fructífero, útil y necesario», la cual tendrá un seguimiento mensual. «Esta iniciativa nace para sumar esfuerzos, optimizar los recursos y no dejar a ningún ondense desatendido. Es hora de ir todos de la mano para cumplir con nuestro objetivo común de hacer de Onda un lugar más justo y con más igualdad social y oportunidades para todos», destacó.

El documento del pacto, aprobado en el pleno por unanimidad, también incluye otras medidas sociales, como la línea de 200.000 euros de ayudas a familias o la ampliación de los convenios con Cruz Roja y Cáritas.

'Tour' de la alcaldesa por los comercios locales

Además, la alcaldesa y la concejala de Promoción Económica, María Baila, están recorriendo durante esta semana, carro en mano, todos los establecimientos de la ciudad para repartir a los comerciantes el material de la campaña 'El comerç d'Onda, el cor de la ciutat', que ha puesto en marcha el Ayuntamiento para fomentar las compras en los comercios locales. Asimismo, Ballester aprovecha estas visitas para escuchar y preocuparse por la situación de los emprendedores locales.