La empresa Facsa, concesionaria del servicio de gestión del agua potable en Nules, acomete la reparación de una de las juntas de la red de distribución, cuya rotura ocasionó una serie de filtraciones en el párking subterráneo de la avenida València, lo que obligó a inhabilitar durante unos días varias de las plazas de estacionamiento de vehículos.

Precisamente, el alcalde, David García, explica que el desmontaje de las planchas que recubren las pareces del recinto «sirvió a los técnicos municipales para concluir que, además, la empresa Sedesa Concesiones SAU no ejecutó el sistema de drenaje de forma correcta durante la construcción de esta instalación, de manera que los técnicos han redactado un informe al respecto, que se incluirá en el procedimiento judicial abierto entre la mercantil Sedesa y el Ayuntamiento».

CONTRATO // El munícipe nulense hace hincapié en que la adjudicataria de las obras del aparcamiento subterráneo, que el consistorio se encargó de gestionar para volver a abrirlo al público en diciembre del 2017 después de que la empresa concesionaria lo mantuviera cerrado durante meses, «no cumplió su contrato con esta Administración desde un principio». Y asegura que «seguiremos indagando para reclamar una indemnización al municipio por daños y perjuicios, ya que las consecuencias y reparaciones las asume la institución local».

Para García, se trata de una «mala ejecución de la obra que se suma a los daños ocasionados tras años sin utilizar este espacio». Un cierre por el que el consistorio multó en el 2016 con 6.000 euros a Sedesa Concesiones tras mantener clausurado el estacionamiento más de dos años, alegando falta de rentabilidad.

La infraestructura tiene 250 plazas de aparcamiento y, en su momento, supuso una inversión de dos millones de euros. El consistorio rescindió el contrato por la inactividad del recinto y aplicó el «secuestro de la concesión».