El Día de los Mayores reunió ayer a más de 1.200 personas en la plaza Pere Cornell de Almassora. La localidad vivió uno de los actos más multitudinarios de los festejos que se celebran en honor a Santa Quitèria y en el que no faltó una suculenta merienda y la actuación de Juan Bau, Eva María y Larry. La jornada también incluyó la visita de la reina y las damas a la Unidad de Respiro para familiares de enfermos de alzhéimer y una nueva tarde de toros.

Asimismo, la reina de las fiestas, Nuria Alcalde Vedrí, y las damas de su corte de honor se desplazaron hasta la ermita de Santa Quitèria junto a la alcaldesa, Merche Galí, y otros representantes de la corporación municipal, para compartir una mañana de juegos con los más mayores y las personas cuidadoras.

Y a las actividades dedicadas al colectivo de la tercera edad se sumaron las dirigidas a los más pequeños. Así, la plaza Botànic Calduch acogió las actividades infantiles programadas por la tarde para diversificar las fiestas en los barrios. Es una de las novedades que incorpora el programa y que hoy se desarrollará en la plaza Santa Teresa. A los actos de ayer se sumó la exhibición final de curso de la Escuela de Gimnasia Artística de Almassora.

TOROS // En lo referente a las exhibiciones taurinas, la tarde fue agridulce. El primer toro, Presumido, del hierro de Jacinto Ortega, dejó grandes instantes en la Vila. De hecho, entre los aficionados imperó la idea de que hasta el momento es el mejor visto en lo que se lleva de programa. Con una salida explosiva, ofreció mucho juego en el recinto, permitiendo el lucimiento de rodaors, como Borja Gimeno o Alfonso Gabarri, quienes colaboraron ayer en la grabación de un espacio televisivo. El segundo, Naranjillo, acabó lesionado nada más salir y tuvo que ser devuelto rápidamente a los corrales.