Los municipios de la provincia de Castellón ahorraron más de 10 millones de litros de agua potable diarios durante el ejercicio pasado «gracias al trabajo de localización y control de fugas realizado por la Diputación en las redes de abastecimiento y distribución», indican fuentes del organismo. Los técnicos de la institución realizaron 177 inspecciones en las poblaciones y se encontraron con 175 problemas.

El diputado del Ciclo Integral del Agua, Juan Bautista Juan, asegura que «estas actuaciones se corresponden con la especial sensibilidad del presidente, Javier Moliner, por garantizar el abastecimiento a los vecinos de todos los pueblos de la provincia». «Ayudamos a los ayuntamientos a mejorar el rendimiento de las redes de distribución y contribuir a una gestión que sea eficiente», señala. La labor de este servicio permite, además, controlar los contadores volumétricos que han instalado en los municipios, «obteniendo datos fiables de consumo y la existencia de anomalías», indica Juan. «También para la recogida de cifras y el análisis de los aparatos eléctricos que indican el consumo de agua potable localizados en los depósitos municipales», resalta el responsable provincial del área.

Colaboración // «La Diputación tiene entre sus funciones la de colaborar con las localidades, especialmente las de menor capacidad económica y técnica, para asegurar la prestación de los servicios básicos a los ciudadanos», remarca. Y concluye: «Entre estos destaca el de suministro de agua potable, pues en estos momentos la sociedad exige una garantía tanto de cantidad como de calidad de abastecimiento».