Un año más, y como es tradición desde hace más de 500 años, ayer sábado, antes del alba, los Peregrins de Portell salieron camino de la ermita de Sant Pere de Castellfort. Los 12 penitentes recorrieron en soledad los 13 kilómetros que separan la localidad de la iglesia. A su llegada, se celebró la misa a la que solo ellos tienen derecho a asistir. Por la tarde, regresaron a casa. J. ORTÍ