Después de encontrarse la casa que habían alquilado destrozada, los daños ocasionados por la inquilina en la vivienda de la zona de la Colonia Europa de Vinaròs ascienden a alrededor de 15.000 euros, según aseguraron los propietarios del inmueble. Tras 10 meses intentándolo, los dueños han podido al fin recuperar su propiedad, que habían alquilado en noviembre del 2018 a una mujer, pero en un estado lamentable. Muebles destrozados, basura por todas las estancias y electrodomésticos rotos continuaban ayer en el interior, que ahora requerirá de una desparasitación profesional a fondo que se prolongará durante semanas.
Tras esta desinfección, tal como explicó el propietario, podrán entrar ya a retirar toda la basura y los enseres, y después evaluarán todos los destrozos ocasionados de forma pormenorizada. «La casa es un estercolero, está totalmente insalubre. En estos momentos lo primero es desinfectarla, y este proceso durará unas tres semanas. Después vendrá el albañil y nos centraremos en arreglar todo el deterioro ocasionado», detallan.
Los propietarios también tendrán que volver a dar de alta los servicios de agua, luz y gas, que fueron cortados por impago. «En estos momentos podemos decir que nada de mobiliario ni de electrodomésticos es aprovechable y los daños, por encima, ascienden a unos 15.000 euros, pero podrían ser más», relatan.
Con todos los daños pormenorizados y las imágenes de la casa en su estado actual, el matrimonio presentará una denuncia en el juzgado, aunque reconocen que «el problema es que la inquilina es insolvente».
Tres perros solos
También indican que, cuando la mujer firmó el contrato, le autorizaron a tener una mascota, pero tenía tres. «Durante los últimos nueve meses, la inquilina no vivió en la casa, sino en el piso de su tía en el pueblo, y durante este tiempo estaban en el inmueble sus tres perros solos. Ella venía para traer agua, de ahí tanta acumulación de garrafas en el suelo, y sacos de pienso. Todo eso lo sabemos por los vecinos», explican.
Antes de cumplirse el año de contrato, los propietarios presentaron a la inquilina un burofax con dos meses de antelación para intentar que no continuara en la casa. «Quedamos con ella y le dijimos que iríamos a buscar las llaves, pero nos dijo que las llaves las daría en el juzgado, que no se iba», afirman. Más tarde, a principios de este año, cuando llevaba ya dos meses sin pagar el alquiler, presentaron una demanda judicial gracias a la resolución de la cual han podido recuperar la casa.
