Éxito total». Así de contundente calificó ayer la alcaldesa de Benicarló, Xaro Miralles, la 27 edición de la Festa de la Carxofa, la más innovadora. Si bien las celebraciones en torno a la reina de la huerta local aún no han llegado a su fin y se alargarán hasta el próximo 29 de marzo, sí han llevado a cabo la mayoría de actos más multitudinarios y populares, que permiten tener una visión bastante aproximada del alcance e impacto de uno de los eventos más relevantes que, junto a las Fallas de Benicarló, protagonizan la agenda festiva anual.

En la comparecencia pública, Miralles estuvo acompañada de las concejalas de Turismo y Agricultura, Isabel Cardona e Inma Díaz; el presidente del Consell Regulador de la Alcachofa de Benicarló DOP, Francisco Lluch; y el responsable de la agrupación local de restauradores, Iván Alemán. Todos ellos coincidieron en asegurar que la presente edición «ha sido una de las más multitudinarias de la historia». De hecho, Lluch resaltó: «Año a año se está superando, y cuando empezó hace 27 años nadie esperaba que llegara a donde está hoy».

Valedores y responsables de los excelentes resultados, son, según la alcaldesa, «la comunión de todos los agentes que participan en la organización de la Fiesta, desde los productores a los agricultores, pasando por los comercios, el Consejo Regulador, Benihort y el resto de agentes imprescindibles que la hacen posible».

Las cifras también son reveladoras. En la Demostración Gastronómica sirvieron 18.000 raciones y en la torrà popular de alcachofas cocinaron a la brasa más de 3.000 kilos de la hortaliza. La masiva asistencia y participación redundó en otras actividades, como la Feria de productos de proximidad, o, directamente, en la ocupación hotelera, que superó, el pasado fin de semana, el 90%. Además, la colaboración de Renfe y Adif en diversas acciones promocionales ha resultado clave, y solo la exposición fotográfica en uno de los trenes de media distancia ha hecho llegar la fiesta a más de 120.000 viajeros.