Els Ports aprovecha el boom de las plantas aromáticas como filón turístico. Una oportunidad también económica que es realidad gracias a que los aceites esenciales y aromas, procedentes de hierbas aromáticas, son productos cada vez más buscados por los consumidores. Así, crece el número de cremas, productos de limpieza corporal y del hogar, velas y un largo etcétera que tienen por denominador común este tipo de cultivo como base principal.

Un ejemplo es el del joven agricultor, Albert Guardiola, quien encabeza Esencias de Els Ports, firma de Cinctorres dedicada al sembrado y procesamiento de espliego y lavanda. En solo cuatro años, ya es un referente en la producción de aromáticas en la Comunitat, con más de 100 hectáreas.

Según explica, este tipo de cultivos tiene una larga trayectoria en la zona: «Tradicionalmente se ha recogido espliego, que es la hierba propia, y en los últimos años hemos introducido otras variedades como lavanda o lavandín».

«Tras la cosecha, llevamos lo recogido a una planta de destilación, donde las hervimos hasta sacar los aceites por decantación», tal como explica Guardiola.

Incide, además, en que en los últimos años «hemos ampliado la superficie de cultivo de aromáticas porque son más rentables que el cereal». Esta temporada, el precio del trigo ha llegado a 175 euros por tonelada, mientras el kilo de aceite de lavandin grosso se paga a 20 euros en el mercado mayorista. De una hectárea de aromáticas se pueden extraer 65 litros de aceite, es decir, unos 1.300 euros, mientras que para obtener dicha cantidad del cereal se requieren más hectáreas.

Diego Boix, delegado de La Unió en Els Ports, señala que «esta práctica se ha convertido en una gran alternativa para que no se abandone el terreno cultivable».

Otro factor es que muchos visitantes se interesan por conocer la historia y el proceso de producción. La forcallana Mònica Segura, responsable de la empresa Viu Els Ports, que desarrolla visitas guiadas, explica que «tenemos el proyecto Essències dels Ports, en el que visitamos las plantaciones durante la floración, entre junio y agosto, cuando los campos lucen todo su esplendor». Un éxito que aporta su granito de arena en la lucha contra la despoblación.

Mala temporada para el cereal

La otra cara de la moneda por lo que respecta a los cultivos en Els Ports la representa el cereal, que a diferencia de lo que está ocurriendo con las hierbas aromáticas no ha tenido una buena cosecha en absoluto.

En este sentido, Diego Boix, responsable de La Unió en Els Ports, comenta que «el exceso de agua ha hecho que este año la producción no haya sido la esperada». A ello se suma además, según denuncian desde el sindicato agrícola, que los precios del cereal son muy bajos. «Los costes de producción continúan subiendo y en cambio el precio del cereal sigue siendo el mismo que hace 40 años». En estas condiciones, continuó Boix, resulta « normal que cada vez más agricultores opten por las hierbas aromáticas, que están mucho mejor pagadas, y dejen de cultivar cereal».

El principal causante de esta mala temporada, pues, hay que buscarlo en las abundantes precipitaciones que se produjeron en los últimos meses. Así lo explica el agricultor y ganadero morellano David Royo, «primero llegaron las nevadas y después toda la lluvia que cayó en primavera, lo que ha hecho que parte de la planta se haya podrido y no ha aumentado lo que debería».

Otra problemática a la que tiene que hacer frente el sector agrícola es que «este excedente de agua provoca que salgan otras hierbas que quitan espacio y nutrientes al cereal, lo que empeora más si cabe la producción», concluyó Royo.