El equipo de gobierno de Burriana se plantea la redistribución de las concejalías de Se Puede. La intención es no tocar el Acord per Borriana, el cual establece no solo las dedicaciones de cada partido, sino también quiénes son tenientes de alcalde y qué áreas corresponden a cada una de las tres formaciones que conforman las responsabilidades municipales.

Pero las noticias ocurridas a lo largo de la última semana han convulsionado el consistorio y han minado la imagen de Manel Navarro (Se Puede). Un rosario de impactos políticos que arrancaron con la dimisión del portavoz de la formación morada, Christopher del Moral, y continuaron con intensos cruces de declaraciones, el conocimiento público de la parte de la grabación --en la que se evidencia la escasa relación entre Navarro y sus compañeros de gobierno-- y el espectáculo del pleno del pasado jueves.

A todo ello se une que Podemos tiene claro que Maribel Martínez será no solo concejala, sino la persona fuerte del partido en el Ayuntamiento burrianense y también en el círculo local.

Una serie de factores que llevan a Navarro a quedarse en una delicada situación y sin apoyos.

Ante esta tesitura, lo previsible es que fuercen su salida del gobierno municipal, bien mediante una dimisión o con su paso al grupo mixto, ya sin ninguna responsabilidad de gestión. La idea sería dejar en manos de Se Puede todas las carteras y que el grupo decida si este asume alguna de ellas o se queda sin ninguna.

Quien está a favor de estas opciones y apoyaría a la alcaldesa, Maria Josep Safont, ante una postura fulminante es la portavoz de Cibur, Mariola Aguilera. «Con el corazón en la mano, quítese a este señor de al lado. Si no tiene dignidad y no se va, retírele las delegaciones», apuntó.

Tras realizar este ofrecimiento, la edila prosiguió con su ataque contra Navarro tras su enfrentamiento en la sesión plenaria: «Les rogaría que le dejen sin responsabilidades ya mismo. De lo contrario, dará la razón a los grupos de la oposición de que ustedes solo están aquí para aguantar su sillón y un pacto que nada tiene que ver por el bien de la localidad, sino por sus intereses».

INCÓGNITAS // Las opciones están abiertas y se dilucidarán la próxima semana. Todas ellas irán encaminadas a devolver la estabilidad al Acord per Borriana con miras al algo más de un año que resta aún de mandato municipal.