El Ayuntamiento de Burriana estudia ahora las necesidades de seguridad del depósito municipal de vehículos tras los múltiples asaltos sufridos en la antigua papelera, de los que informó ayer Mediterráneo.

Así lo anunció ayer el edil de Vía Pública, Javier Gual, quien reconoció que el recinto carece de suministro eléctrico y telefónico, dos de los aspectos que se necesitan para poder instalar videocámaras. «Hay que adecuarlo todo de la mejor forma posible», apuntó.

De hecho, la falta de vigilancia y los robos que vienen produciéndose obligaron a reordenar turnos de los policías locales para que una patrulla pudiera estar entre «la puesta y la salida del sol en esta zona, una presencia más que justificada», según Gual.

El también responsable de la Policía Local, indicó: «No se nos puede culpar de los desperfectos. Esperábamos un comportamiento más cívico y lo ideal sería que el depósito estuviera lo más cerca posible de la jefatura».

Por su parte, el PP de la localidad pidió que el equipo de gobierno «deje de despilfarrar porque el cambio de ubicación de este servicio ha supuesto pagar 22.356 euros más al año».