El Ayuntamiento de Almassora contratará un estudio de arquitectos en el plazo de un mes para hacerse cargo de la Oficina de Información de Rehabilitación (OIR) del municipio, cuya apertura fue aprobada el pasado mes de agosto en junta de gobierno. La medida permitirá la puesta en marcha de estas instalaciones como punto de comunicación con los vecinos que vayan a realizar mejoras en sus propiedades. Fuentes municipales justificaron este paso debido a que la ley de contratación no permite al consistorio incorporar a más trabajadores.

La empresa elegida deberá prestar asistencia técnica para la creación del servicio y su activación con un presupuesto de 20.449 euros. El plazo estimado para la primera de las obligaciones se estima en 10 meses. Desde el consistorio prevén numerosas solicitudes porque la Conselleria de Vivienda ha eliminado los requisitos económicos para la concesión de este tipo de subvenciones, de manera que cualquier persona podrá pedirlos; y también se quita la prioridad a inmuebles con una antigüedad de 50 años.

La concejala de Urbanismo, Carmina Martinavarro, explicó en su día que esta oficina, además de dar completa información a los ciudadanos, asesorará a profesionales y empresas del sector. No en vano, uno de los objetivos que persigue el equipo de gobierno con esta medida es el fomento de la actividad entre las firmas de la construcción que se dedican a obras menores.

MEDIDAS DE ESTÍMULO // El convenio firmado entre el equipo de gobierno almazorense y la Conselleria de Vivienda contempla estudiar y aplicar medidas de estímulo que potencien el efecto incentivador de los programas, entre las que figuran reducciones de las tasas de obras aplicadas a la rehabilitación o a la rebaja temporal en el impuesto de bienes inmuebles (IBI), tal y como ya ocurre con el parque de vivienda de protección pública.