Controversia en Villores tras conocerse las normas de la consulta popular para decidir el próximo sábado el futuro de los bous al carrer bous al carreren la localidad, por las dudas que suscita y revelarse como un proceso teledirigido.

A través de un mensaje en el canal municipal de WhatsApp, el Ayuntamiento anunció las reglas de la votación, la cual se efectuará en media hora de tiempo, entre las 12.30 y las 13.00 horas. Llama la atención que el referéndum incluirá a los empadronados y también a vecinos sin estar censados, los cuales podrán participar solo de manera presencial, sin concretar los criterios. Asimismo, los registrados en el municipio que vivan fuera del mismo lo podrán hacer delegando su postura a otro habitante. Todos deberán tener más de 18 años.

Pero uno de los aspectos que levanta más suspicacias, como se puede comprobar en la imagen adjunta, es que si gana el sí a los toros «se exigirá en el recuento que diez personas se responsabilice del montaje y desmontaje de las barreras y del voluntariado». Por contra, en caso de vencer el no, los promotores adelantan que se celebrará una «alternativa atractiva». Además, fuentes municipales barajaban ayer la posibilidad de no realizar la consulta si en la asamblea ciudadana previa a la votación se llega a un acuerdo entre los presentes.

Pocos vecinos quieren expresar su opinión sobre este asunto. Juan Antonio Querol, gerente del bar, señala que «parece un amaño para que salga el no, escondido detrás de un teórico referéndum. No es claro, ni transparente». Por otro lado, el exalcalde del PSPV, Pere Milián, es favorable a la consulta: «Lo importante es que decidamos entre todos con la máxima participación».