El humedal del Cuadro de Santiago de Benicàssim recibió ayer la visita de la alcaldesa, Susana Marqués; el diputado provincial de Medio Ambiente, Mario García; el edil del área, Clemente Martín; y el presidente del Coto Arrocero, Isidro Salas. Este último trasladó a las autoridades el malestar del sector que se considera “perjudicado” por la falta de desecación del espacio, ante la avería de parte de las tuberías de drenaje y la reciente declaración como zona húmeda de la Comunitat, que le garantiza una mayor protección como espacio natural.

García se pronunció en la línea en que ya lo ha hecho Marqués y declaró que la zona en cuestión “se desecó conforme a la ley y con todos los informes ambientales favorables”. “Está bien que la Generalitat quiera ahora revertirla. Es una voluntad política, pero supone también una responsabilidad patrimonial de compensar a las administraciones, vecinos y agricultores que ven perjudicados sus derechos”, afirmó.

Por su parte, Salas lamentó no haber recibido de momento ninguna respuesta del Consell, “a pesar de mantener reuniones con los responsables de Medio Ambiente”. Y confía en “poder transmitirles las consecuencias por la inundabilidad del área, con problemas de salubridad, y no poder cultivar las tierras, las cuales se están abandonando”. H