Burriana Assets Investment (BAI SL), el grupo inversor que impulsará el PAI Sant Gregori de Burriana, ha comprado el 80% la deuda que la urbanizadora (Urbanización Golf Sant Gregori) tenía con 4 bancos. La operación se formalizó el lunes y ayer ya se informó por registro al consistorio.

Fue una noticia acogida con satisfacción por el equipo de gobierno, que la calificó como «muy importante» para la ciudad. La alcaldesa, Maria Josep Safont, recalcó que «es el punto de salida para la viabilidad del programa».

La tarea ha sido ardua y dilatada en el tiempo. Se ha acumulado alrededor de un año de negociaciones con los grandes acreedores --Bankia (que posee el 20%), BBVA, Sabadell y Santander (que sumaban el 80% restante)--, que fructificaron esta semana con el abono al último de ellos, con lo que se cerró una amplia mayoría del adeudo. Así, Bankia, con la que falta llegar a un acuerdo, se deberá regir ahora por los mismos cánones que los otras tres.

LOS PASOS // Precisamente, por el débito con los bancos Sabadell, BBVA, Santander y Bankia, la mercantil decidió el 30 de diciembre del 2014 entrar en concurso voluntario de acreedores, pues no logró del consistorio un aplazamiento de dos años para comenzar las actuaciones. Esa era la herramienta para que los administradores no cayeran en responsabilidades jurídicas.

Casi tres años y un mes después, el PAI cobra vida y, aunque aún restarán varios meses antes de salir del concurso de acreedores, alcanzan un gran empujón, al ser el primer paso para la urbanización de los 2,5 millones de metros cuadrados existentes.

Así constaba en el diseño que se presentó en el edificio consistorial en el 2000, el cual contemplaba la ejecución de un campo de golf con un total de 18 hoyos.

REACCIONES // La primera edila apuntó: «Nos alegramos de la compra de la deuda, que se ha producido después de un tiempo de duras negociaciones del nuevo inversor con los bancos, aunque sabemos que aún queda un largo camino, puesto que la urbanizadora ha de solucionar las causas de la rescisión antes de comenzar la construcción».

Por su parte, Vicent Granel de Compromís, añadió que «la iniciativa urbanística estaba en una situación in extremis, en la que se debía actuar con seriedad para llevarla a buen puerto».

Al tiempo que el otro portavoz del equipo de gobierno, Christopher del Moral, de Se Puede Burriana, aseguró: «Estoy de acuerdo con los pasos llevados y el proceso debe seguir para que esta propuesta sea un bien para la localidad y dejar de lado otras opciones». Y es que, tras cerca de una década de trámites, este importante plan coge aire.