Los pocos agricultores que quedan en Castillo de Villamalefa, un municipio con algo más de 30 habitantes, están preocupados por la situación que les ha tocado vivir en el campo por la pandemia. Ante el confinamiento, el Gobierno decretó que la asistencia a los huertos particulares quedaba permitida para garantizar el suministro de alimentos, pero con una condición: «el agricultor debe ir provisto de un título que acredite la propiedad o inscripción en el Registro Agrícola, o de una acreditación expedida por su organización, cooperativa o entidad a la que pertenezca», detalla el Ejecutivo, algo que ha generado más de un susto en esta pequeña localidad.

Y es que los vecinos que trabajan algunas de estas parcelas mantienen su inquietud por el miedo a encontrarse con la Guardia Civil y no poder demostrar que, siendo suyo el terreno, no disponen de un documento oficial que refleje la titularidad.

Así lo expresa el alcalde, Diego Gallén, que muestra a Mediterráneo su preocupación ante la realidad de que hay parcelas donde sus responsables no tienen el registro de la propiedad, «porque son fincas que mantienen ellos pero sus dueños viven en Barcelona o porque constan a nombre de los padres y no al suyo».

"Miedo a ir al campo"

Un vecino que tiene su huerto cercano a la carretera se muestra rotundo: «Tenemos miedo a salir al campo». Este año no ha plantado las patatas y los productos que ha cultivado ni tan siquiera los ha recogido. «No te atreves por si te pilla la Guardia Civil y no puedes demostrar que el terreno es tuyo. Porque las medidas de seguridad son fuertes y la cuestión no va de broma», comenta al respecto.

Otro agricultor que tiene una finca cerca de la Masía del Codadillo señala que muchos se autoabastecen de lo que cultivan, por lo que cree que es importante no ser tan exigentes en los municipios pequeños. «Precisamente porque ahí es donde menos riesgo de contagio existe», opina.

El consistorio envió a los vecinos el documento del Gobierno con estas normas, apelando a la responsabilidad y «la competencia que tiene la Guardia Civil». Por ello, el alcalde recomienda estar el mínimo tiempo posible en el huerto. Es decir, «no pasar el día allí, sino recoger los productos y volver a casa».