Rogelio Rodrigo Rodrigo, de 71 años, natural de Chulilla (Valencia) y con residencia provisional en Jérica, falleció en la madrugada del sábado al domingo en la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital de Sagunto, como consecuencia de las heridas provocadas por la cogida del segundo toro embolado, que se celebraba dentro de la programación de sus fiestas patronales.

El hecho ocurrió sobre las dos de la madrugada, cuando el astado, de la ganadería de Fernando Machancoses, patrocinado por las peñas, entró en la plaza de toros desde una calle que confluye en ella, raseando una de las rateras laterales. El accidentado, que se encontraba fuera del cadafal, no tuvo el tiempo suficiente para penetrar por los barrotes hasta el interior, por lo que el animal le golpeó bruscamente en el cuerpo y la cabeza con la cornamenta. Tras ello, el ejemplar siguió su recorrido sin detenerse y dejando al aficionado tumbado en el suelo, ya sin conocimiento.

La rapidez con la que se movió el embolado resultó fatal para la víctima, tal y como se puede apreciar en la secuencia de imágenes del vídeo que acompaña a esta información, y que se puede ver en su totalidad en la página web de Mediterráneo.

De manera inmediata, fue socorrido por los aficionados que estaban a su lado y trasladado a una ambulancia que, al comprobar la gravedad de la cogida, inició el desplazamiento hasta la Mini Fe de Sagunto, donde ingresó sobre las 2.50 horas, según precisó su pareja, Rosa María Guerrero, quien fue avisada de la situación extrema en la que se encontraba el herido. Lamentablemente, pese a los esfuerzos del personal médico, no se pudo recuperar de las lesiones y falleció sobre las 10.30 horas de ayer.

NO SOLÍA ARRIESGAR / Rogelio, en contra de las preferencias de su mujer, era un buen aficionado a los toros, aunque no solía arriesgar. Durante años, fue asistente habitual a este tipo de espectáculos, especialmente de Náquera, donde residía con anterioridad con su pareja. Ya en los últimos años fue asiduo en Jérica, su lugar de residencia actual.

El evento taurino del sábado concluyó de forma abrupta por esta grave incidencia, si bien la agenda taurina de ayer, último día de fiestas, se desarrolló según la programación prevista.