Jugada maestra o suicidio político. Compromís por Borriol presentará una moción de confianza ligada a la aprobación de los presupuestos al pleno del próximo martes, ya que el Ayuntamiento lleva tres años con cuentas prorrogadas, lo que ha generado una situación de «bloqueo insostenible».

Así lo denomina el alcalde, Silverio Tena, que gobierna en minoría y da este paso «para forzar a que el pueblo tenga un presupuesto para cubrir las necesidades de los vecinos».

Una decisión que puede terminar con Tena fuera de la alcaldía, pues si no obtiene el respaldo de la oposición --leáse PP y, especialmente, Veïns-- estos tienen 30 días para presentar una moción de censura. «Pero si transcurre el plazo marcado y no la registran, los presupuestos se aprueban», matiza el primer edil.

«El actual equipo de gobierno toma esta valiente decisión porque antepone los intereses de Borriol, por delante del cargo y de la situación personal, pues el pueblo tiene nuevos retos que estos presupuestos desfasados y obsoletos no solucionan», recoge un comunicado remitido por la formación de Tena, que insiste en que «así no se puede trabajar».

«Ha sido una decisión estudiada» y consensuada con el PSOE, como admitió su portavoz, Francisco Pastor. «Si tiene que haber un cambio de asientos, que lo haya y si alguien tiene ideas mejores que las diga, pero que se manifiesten públicamente porque ahora los plenos son un drama, con la oposición es todo un no porque no», lamenta el socialista.

El comunicado fue recibido con «sorpresa», por el portavoz del PP, Ivan Pauner, que avanzó (a expensas de reunirse con el partido), su «no rotundo» por el hecho de enterarse de la noticia por Mediterráneo y por el poco diálogo existente con Compromís en el último año. «Debería haberme llamado para comunicarlo, no tiene sentido», manifestó.

Por parte de Veïns, Jordi Carballeira, exsocio de gobierno de Tena, fue crítico con el alcalde al afirmar que «ni se ha puesto en contacto para consensuar los presupuestos ni otras medidas». Carballeira, que tiene la clave en este momento, se ciñó al resultado de la reunión de su ejecutiva.

Ambas formaciones deberán estudiar ahora el próximo paso.

OTROS CASOS

La moción de confianza es un instrumento político adoptado recientemente en A Coruña y Barcelona.

En el caso gallego, el alcalde, de Marea, perdió la cuestión vinculada al presupuesto al no apoyarle ni PSOE ni PP. Y se abre el plazo para una moción de censura.

En la ciudad condal, Ada Colau ya tiene las cuentas al no haber presentado la oposición un gobierno alternativo.