El Ayuntamiento de l’Alcora ha puesto en marcha un “ambicioso” plan de eficiencia energética con el que el equipo de gobierno prevé ahorrar a las arcas municipales más de 41.000 euros al año. El proyecto cuenta con varias iniciativas, entre las que destaca el nuevo procedimiento de contratación del suministro eléctrico en todos los edificios públicos, así como del alumbrado exterior de la casa consistorial.

Según explica el concejal de Urbanismo y Medio Ambiente, Samuel Falomir, esta primera medida permitirá ahorrar un 11,05% respecto a lo que el consistorio pagaba hasta ahora, lo que en términos económicos supone más de 31.000 euros anuales.

Falomir argumenta que el objetivo de este plan es “reducir y optimizar el consumo energético, consiguiendo importantes réditos económicos y contribuyendo a diseñar un municipio más sostenible ambientalmente”.

NUEVA BATERÍA // En segundo lugar, en breve, se instalará una batería para los condensadores de la ciudad deportiva que posibilitará reducir el consumo de energía reactiva. Según Falomir, estos trabajos adelgazarán el gasto energético en 4.500 euros. Las obras de este proyecto costarán 4.279 euros, lo que supone que se amortizarán en apenas un año.

Además, en distintas zonas del municipio se sustituirán las actuales bombillas de las farolas por nuevas del tipo led. Esta tercera disposición implicará un ahorro anual de 7.404 euros en la factura eléctrica de la localidad.

Para ello, se ha realizado un nuevo procedimiento de contratación en el que se ha obtenido un descuento de 9.432 euros respecto al presupuesto base de licitación. Asimismo, se han alcanzado una serie de mejoras basadas en la sustitución de 44 lámparas de vapor de sodio y el equipo electromagnético por otras de halogenuros metálicos de 60 V y un equipo electrónico de mayor eficacia. Estas últimas podrán ser reguladas para que, durante las horas centrales de la noche, iluminen con menos potencia.

NUEVAS LUMINARIAS // Por último, el ahorro obtenido en el proceso de contratación se ha reinvertido en la sustitución de las luminarias existentes en el paseo Baix la Vila, dado que se trata de farolas antiguas que se encontraban en un importante estado de deterioro. Dichas bombillas también se han cambiado por luces que permiten el ahorro energético. H