El alcalde de l’Alcora, Samuel Falomir, y el presidente de Facsa, Enrique Gimeno, firmaron ayer jueves un convenio de colaboración con el fin de promover ayudas que garanticen a las familias sin recursos económicos el acceso al suministro de agua potable.
En concreto, según explicó Falomir, «el objetivo es asegurar que se pueda dar cobertura a todas las personas que tienen dificultades para afrontar los costes derivados de este servicio».
Por un lado, los servicios sociales municipales evaluarán las circunstancias concretas de cada caso para determinar los ciudadanos que podrán acceder a las ayudas. Desde el Ayuntamiento se avisará a Facsa para evitar la suspensión de la prestación y abonar los importes. En ese sentido, la mercantil se compromete a la continuidad del suministro sin aplicar cargos por demora, además de facilitar al consistorio la documentación e información sobre las bonificaciones sociales.
«A través de este pacto queremos contribuir a promover soluciones que contribuyan a paliar de forma efectiva el problema que supone la pobreza energética», indicó Gimeno. «Tenemos que estar al lado de las personas que se encuentran en una situación más vulnerable», añadió el alcalde. Por su parte, el concejal de Bienestar Social, Agustín Chiva, destacó que «esta rúbrica se suma a las iniciativas de Servicios Sociales en beneficio de las familias más necesitadas».
