El alcalde de l’Alcora, Víctor Garcia, ha anunciado que el objetivo del consistorio es implicar en el proyecto de restauración de la histórica Real Fábrica del Conde de Aranda «a los sectores empresariales de Castellón, a la Diputación y a la Generalitat, ya que una vez esté la compra total del terreno terminada se pretende que sea declarada bien de interés cultural (BIC)». El objetivo de proteger este espacio es poder acceder a la ayuda del 1% Cultural del Ministerio de Fomento y así poner en valor el edificio.

En este sentido, el primer edil ha solicitado ya una reunión a la Diputación sobre el tema. Además, Garcia pretende dar participación en la actuación a empresas de l’Alcora y entidades como la Caixa Rural alcorina, «ya que el gran proyecto necesita de la implicación de todos».

En cuanto al papel de la Conselleria de Cultura, el munícipe resaltó que el conseller de Educación, Investigación, Cultura y Deporte, Vicent Marzà, durante una reciente visita a la localidad ya conoció de cerca el plan para rehabilitar este emblemático inmueble que se encuentra prácticamente en escombros y mostró su predisposición a colaborar en la puesta en valor de esta fábrica «como referente histórico, cultural y reclamo turístico».

La producción de esta fábrica, inaugurada en 1727 y cerrada en 1944, protagoniza la colección más importante de los fondos del Museo de Cerámica de l’Alcora. Además, algunas de sus piezas se encuentran repartidas por los museos más prestigiosos del mundo. El director de este centro cultural, Eladi Grangel, señaló que se trata de un proyecto que es «mucho más que la recuperación de un espacio para usos sociales o culturales. Estamos recuperando memoria, historia, identidad. Tenemos que trabajar todos unidos para conseguir que se haga realidad algo que muchos veníamos reivindicando desde hace mucho tiempo». «Hay que implicar a todas las administraciones, porque la recuperación de la Real Fábrica no atañe solo a l’Alcora, ya que en ella se encuentra el origen de uno de los sectores industriales que más riqueza ha dado a la provincia y al conjunto de la Comunitat», señaló.

El cronista oficial, José Manuel Puchol, mostró su satisfacción, «porque ya era hora de que las autoridades, arropadas por los vecinos que, en su gran mayoría, perviven gracias a la cerámica, recuperen la fábrica». H