El Ayuntamiento de l’Alcora ultima el proyecto de remodelación de la calle Enrique Grangel Girona, una actuación demandada por los vecinos al tratarse de una arteria urbana importante y muy transitada. Este proyecto es una de las primeras providencias de alcaldía que Samuel Falomir ordenó al inicio de legislatura, con la previsión de que las obras puedan dar inicio el año que viene.

«El objetivo de esta actuación es mejorar la accesibilidad y la seguridad de los vecinos y vecinas ensanchando las aceras, que será posible haciendo el vial de dirección única», destacó Falomir.

Mejoras// El primer edil explicó que, en la actualidad, las aceras son «muy estrechas y apenas hay espacio para que se crucen dos vehículos». De esta manera, peatones y conductores verán mejoradas las condiciones de circulación por esta transitada calle de l’Alcora. Se trata de la zona alta de la población, donde se encuentra el Casal Jove y el Centro de Educación Infantil y Primaria (CEIP) Conde de Aranda, y que mucha gente utiliza para cruzar el pueblo sin pasar por el centro.

Por otro lado, Falomir recordó que este mes comenzarán las obras de mejora de las calles Cordeta, Travesía San Cristóbal y el final de la calle San Cristóbal, un vial que ya se empezó a urbanizar en el 2016 con las primeras actuaciones. El plan asciende a 110.000 euros y está financiado por la Diputación, a través del Plan 135, y continuará la línea que se ha seguido en los últimos años en el casco antiguo: urbanizarán los viales y se les dotará de una nueva pavimentación.

Las obras darán inicio con la demolición de la calzada, la acera y los bordillos de la zona. A continuación se procederá a la apertura de caja para el pavimento con unas excavaciones que se ejecutarán con medios mecánicos y ayuda manual. Además, abrirán las zanjas para albergar los diferentes servicios: red de saneamiento, red de pluviales y red de abastecimiento de agua potable.