El pasado 26 de febrero la consellera de Sanidad, Ana Barceló, anunció en una visita a la Vall d’Uixó la «inminente» licitación de las obras de ampliación y reforma del centro de salud I de la localidad, ubicado en la calle Octavi Ten. Ha tardado un mes --en su día se habló de aproximadamente dos semanas-- pero ya es un hecho. En la plataforma de contratación de la Conselleria ya se pueden consultar los detalles.

El camino hasta llegar aquí ha sido largo y no exento de obstáculos. Desde que la anterior responsable de Sanidad, Carmen Montón, diera a conocer los detalles del proyecto han pasado muchas cosas. Entre ellas, dos sustanciales: la modificación de ese documento y el incremento del presupuesto de licitación, de 1.400.000 euros pasa a los más de 2,6 millones presupuestados ahora.

Ayer lo hizo público la administración autonómica a través de un comunicado: «El centro prácticamente doblará la superficie» de que dispone hoy en día. Tras demoler el antiguo edificio del INSS, se construirá uno de nueva planta que se conectará con el centro de salud, que sufrirá una considerable reforma.

Asimismo, el Consell ofreció un dato relevante: estas nuevas instalaciones prestarán servicio a 23.000 usuarios, porque vecinos de localidades vecinas podrán beneficiarse de las especializades que se prestarán en la Vall.

VALORACIÓN // La alcaldesa, Tania Baños, no tardó en reaccionar al anuncio. «Por fin, estos son los últimos pasos para que empiecen las obras, previsiblemente en junio», señaló, a la vez que incidió en que «hasta llegar a este punto han sido necesarios muchos y largos trámites burocráticos para la cesión, entre diversas administraciones, de los terrenos del antiguo INSS». Aunque la más reciente demora no ha tenido que ver con papeleos, sino con el cierre del centro de Carbonaire durante un año --por la aparición de una grieta en su fachada-- que obligó a trasladar todos los servicios médicos hasta el inmueble que está pendiente de demolición.