Los ayuntamientos del litoral castellonense están preparados para realizar fumigaciones aéreas contra los mosquitos en caso de la llegada de fuertes lluvias o la denominada gota fría.

Los expertos en la materia consideran el final de este mes como el más “crítico y peligroso”, tras el verano, ya que si las temperaturas se mantienen elevadas y se registraran inundaciones, se podría producir una eclosión de estos insectos, especialmente en zonas de marjaleria. No obstante, se podría actuar en un plazo máximo de 96 horas, ya que consistorios como “la Llosa, Nules, Almenara y Moncofa, que integran el área mas problemática en la marjal sur, ya cuentan con la preautorización de la Conselleria de Sanidad para poder actuar desde el aire si no es posible acceder de otro modo”, como explicó el director técnico de laboratorios Lokímica, Rubén Bueno, que desarrolla los tratamientos en una docena de municipios de la provincia. También han sido previsores los consistorios de Torreblanca y Cabanes (este último solicitó el permiso en julio) para actuar desde el aire en el paraje natural del Prat. El método que se utiliza en este tipo de sistema es únicamente el larvicida. “El tratamiento es respetuoso con el medio ambiente y afecta únicamente a las larvas del mosquito”, explica Bueno. Estos trabajos se llevarán a cabo desde helicópteros y fuera de las zonas habitadas, en concreto en humedales y en los lugares con riesgo de inundación.

refuerzo // La medida, de hecho, cuenta con el apoyo de la Diputación. El responsable provincial de Desarrollo Sostenible, Mario García, recordó que dentro de la campaña 2016, a la que se han destinado 400.000 euros, se han realizado acciones de refuerzo como las reuniones con profesionales, como campings y hoteles o “el encuentro con los municipios con zona de marjal para activar, en caso de ser necesario, el permiso para la fumigación aérea en un plazo de cuatro días”.