Almassora celebró ayer con brillantez el 450° aniversario del nacimiento de San Luis Gozaga, gracias a la ilusión y al trabajo de la Congregación Lluïsos, quienes prepararon una intensa jornada de actividades para ensalzar la figura del religioso.

Una programación que cobró su máximo esplendor por la tarde, con la celebración de una participativa procesión, en la que se invitó a participar a todas las cofradías de la población, así como a otras de localidades vecinas, que engrandecieron el evento.

Los miembros Lluïsos Almassora, entidad formada por integrantes de diversas edades, fueron los protagonistas del desfile que tuvo como protagonista a la peana de San Luis, llevada por los portadores. Poco antes, esta imagen presidió el altar de la iglesia de la Natividad, junto a la de la Purísima, que también procesionó, con motivo de la misa solemne en honor a San Luis, celebrada en la parroquia. De hecho, el párroco del templo, Juan Ángel Tapiador, fue parte importante de la jornada con su implicación.

De hecho, este sacerdote fue uno de los impulsores de las charlas Testimonios de un santo, que tuvieron lugar en los salones de CaixAlmassora durante la mañana. Aunque fueron los niños quienes disfrutaron de la primera propuesta del día, a través de la organización de iniciativas de ocio en la zona del Raval, frente a la sede de la congregación.

La celebración culminó con el disparo de un castillo de fuegos artificiales, tras la procesión y la cena de gala en CaixAlmassora. El concejal de Juventud, Xavier Trenco, quiso destacar que el evento de ayer fue «único» en las comarcas de Castellón.