La lluvia hizo acto de presencia a lo largo de la mañana de ayer en Burriana, pero sobre todo, justo antes de disparar la primera mascletà de las Fallas de Burriana 2018. Aunque fue una fina lluvia, desanimó a algunos sectores a acudir, ya que las falleras iban ataviadas con el traje regional.

El público también menguó e incluso la humedad afectó visualmente al primer disparo de las fallas, impidiendo que el humo subiese rápidamente. Pero, por si todo ello no era suficiente, la pirotecnia jugó una mala pasada, pues cortó el devenir programado y hubo que acabar la mascletà a la antigua usanza, prendiendo manualmente la mecha. Todos los inconvenientos no impidieron que los asistentes vibraran con la pólvora y estallaran en aplausos cuando finalizó.

La localidad está preparada, desde el arranque de las fiestas, para el correfoc que da paso al castillo de fuegos artificiales, previsto para las 21.00 horas de esta noche. El acto corre a cargo de la compañía castellonense Xarxa Teatre, cuyos miembros representarán Nit Màgica. El espectáculo cuenta con una pequeña variación respecto al tradicional, ya que utiliza figuras de cartón-piedra pertenecientes a El foc del mar. El correfoc arrancará sobre las 19.45 h., frente al colegio Salesianos, y tras recorrer las calles Camí d’Onda, Encarnación, Raval, plaza El Pla y la calle Mayor, culminará sobre un escenario en la avenida Poeta Calzada. Desde allí se contemplará el castillo.