La incertidumbre y la preocupación se ha instalado en la mayoría de las viviendas que integran el Grupo 1º de Mayo de Nules, tras recibir una carta del Ayuntamiento en la que se les informa de que unas obras de rehabilitación de los bloques de pisos que iban a ejecutarse a través de una subvención autonómica --según un proyecto iniciado durante la legislatura anterior--, van a tener que ser asumidas por los vecinos, de acuerdo con las indicaciones municipales, como criticó en el último pleno el Partido Popular.

Este barrio, que presenta una evidente degradación, se encuentra a las afueras del municipio, en la carretera de la Vilavella. Integrado por seis bloques de pisos de tres escaleras por bloque, algunos de los inmuebles presentan problemas de aluminosis.

Ejecución subsidiaria

Según quien fuera concejal de Urbanismo la legislatura pasada --actual portavoz del PSOE en la oposición, Adrián Sorribes--, se planteó la necesidad de intervenir porque «estos bloques tienen dificultades de comunidad que les impiden asumir el coste de obras estructurales que hay que llevar a cabo». De ahí que se estudiaran varias opciones, entre ellas, solicitar una subvención al Área de Rehabilitación y Regeneración Urbana (ARRU) de la Conselleria de Vivienda. Se tramitó la solicitud con toda la documentación preceptiva, como un Informe de Evaluación Estructural (IEE), que evidenciaba el mal estado --algunos peor que otros-- de los inmuebles, pero «era una subvención competitiva» y no se obtuvo la puntuación suficiente.

El resumen es que con los informes en la mano, la Conselleria exige ahora una actuación urgente y el Ayuntamiento, al menos como se evidenció en el pleno, apunta solo a los vecinos.

¿Quién responsabiliza a quién?

El alcalde de Nules, David García, se desvincula del asunto del Grupo 1º de Mayo, señalando a sus antiguos socios de gobierno, que gestionaban Urbanismo y Vivienda, aunque ayer confirmó que se mantendrá una reunión el próximo día 12 en la Conselleria para «ver qué soluciones podemos aportar».

El portavoz socialista, Adrián Sorribes, califica de «vergonzoso» que la respuesta de García sea trasladar el problema a los vecinos, «a sabiendas de que se trata de personas, en su mayor parte, con escasos recursos». Y recuerda que el Grupo 1º de Mayo está protegido en el PGOU.

Mientras García afirma que esta situación es consecuencia de «una promesa preelectoral» de los socialistas de la que en su día no fue informado, estos le acusan de «vivir de espaldas a un problema social evidente». Adrián Sorribes sentenció ayer que «es obligación del gobierno local dar una salida a este conflicto social», insinuando que lo que sucede es que «no tienen ni idea de cómo gestionarlo».