En la carretera que conecta Nules y la Vilavella, desde hace varios días puede comprobarse cómo avanzan las obras de construcción del segundo tramo del carril bici que ha de conectar ambos municipios. Se trata de un proyecto cuya ejecución corresponde a la empresa cerámica Stylnul, dentro del plan de urbanización del PAI que ocupa y que en un futuro tendrá continuidad con la fase que corresponde al Ayuntamiento de la Vilavella, entre la citada firma y la rotonda de acceso al municipio.
Como destacó su alcaldesa, Carmen Navarro, «la totalidad de esta actuación se desarrolla en término municipal de Nules, no tiene que ver con la Vilavella, nuestra parte lleva varios años incluyéndose en el presupuesto, con una dotación de 30.000 euros». Aunque no se ha ejecutado todavía ante la necesidad de que existiera una conexión efectiva para esta vía reservada, que comenzó a ejecutarse en el 2018, con la primera fase, en Nules.
Se trata de un plan con un total de 195.000 euros de presupuesto, financiado por la Conselleria y no exento de polémica por la inseguridad que generó en el acceso al municipio desde la antigua N-340 y la A-7.
Avanza el bulevar
En la Vilavella, ajenos a esta controversia que se centró exclusivamente en Nules, están centrados en este momento en la ejecución de las obras contempladas en el Plan 135 de la Diputación, para continuar con la urbanización del bulevar en la carretera de la Vall d’Uixó.
La Vilavella está enmarcada por dos carreteras, la ya citada y la que continúa hacia Betxí. En la primera, llevan ejecutándose diversas actuaciones de forma gradual, con la participación de diferentes administraciones, para dotarla de mayor seguridad, dado que, tras la cesión de la Diputación, ha pasado a ser una calle más del municipio, muy frecuentada por los vecinos y con mucha circulación, pues da acceso al polígono industrial y los almacenes citrícolas.
En la actualidad, está en construcción el tramo de adecuación entre el Camí Real y la calle Pintor Ribera, con un presupuesto de licitación de 80.000 euros.
Navarro explicó que, además de completar un nuevo tramo del bulevar, con el resto de los planes provinciales quieren actuar en la parte rústica creando un carril ciclopeatonal, pero también mejorando la recogida de las aguas pluviales y fecales. «Todas las del municipio confluyen en esta zona y nunca se han gestionado de la forma más eficiente», adujo, lo que provoca que «toda la zona urbana se inunde cuando llueve».
