El grupo Marina d’Or presenta una demanda ante el Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV) para reclamar a la Generalitat una indemnización de 600 millones de euros tras la anulación del plan de actuación integrada (PAI) que contemplaba la construcción de tres campos de golf y una zona residencial en los términos municipales de Orpesa y Cabanes.

Fuentes de la empresa explicaron ayer esta decisión, que atañe a una medida tomada por el Consell que presidía el PP, pero declinaron hacer declaraciones, puesto que esperan que la justicia siga su curso y decida sobre el asunto.

En concreto, el PAI contemplaba la construcción de una gran zona residencial con unas 35.000 viviendas, una pista de esquí artificial, hoteles de lujo, un lago artificial y tres campos de golf, sobre una superficie de 18 millones de metros cuadrados. Sin embargo, tras un largo litigio en los tribunales, finalmente el Tribunal Supremo confirmó la anulación del proyecto en febrero del 2016, al considerarlo «nulo de pleno derecho», por no contar con la declaración de impacto ambiental acorde con la normativa estatal.

El fallo truncó la voluntad de la compañía de expandirse urbanísticamente en esa zona y ahora reclama una indemnización millonaria por entender que su anulación fue responsabilidad de la Generalitat, al no facilitar el plan.