El derribo de la zona de locales comerciales en la urbanización Peñíscola Playa tendrá lugar «en días». Así lo avanzó el alcalde de la localidad, Andrés Martínez, en el transcurso del último pleno de la corporación municipal. De esta forma pondrán fin a un contencioso de tres décadas, originado por el exceso de volumetría de la edificación, situada en la primera línea de costa.

El comentario del primer edil llegó tras el apartado de lectura de comunicaciones oficiales, en el que dieron cuenta de un auto del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV) que desestima y pone fin a los últimos recursos presentados e insta al consistorio a que proceda con la demolición, como responsable subsidiario.

Desde la administración local ya remitieron una carta a los propietarios y afectados de los locales, con el fin de que dejen vacías estas propiedades. Tenían un mes de plazo y, posteriormente, dar cuenta de ello al Ayuntamiento, que, a su vez, el 21 de enero tiene que levantar acta de comprobación para remitirla al TSJCV.

CUMPLIMIENTO / Martínez indicó que el gobierno local obedece las instrucciones recibidas desde los órganos judiciales y recordó que el origen del asunto se remonta a cuando él tomó «la primera comunión», pero será él «quien esté al frente de la demolición». Para llevar a cabo esta medida, con el objetivo de devolver la legalidad urbanística, hace dos años adjudicaron los trabajos, por un importe de 24.716,51 euros, IVA incluido. El anterior episodio de este caso se produjo durante la pasada primavera, con el precinto de actividad de los locales.