Los vecinos de Almassora podrán hacer uso «en breve» de nuevo del pabellón B, situado junto al CEIP Regina Violant y compartido con el colegio, una vez se complete este mes su cesión al consistorio.

Así lo anunció ayer el conseller de Educación, Cultura y Deporte, Vicent Marzà, en su visita a las obras del centro educativo. «Abrir este espacio a la población supone que favorecemos la práctica del deporte en todas las edades», indicó el cargo del Consell.

Este recinto cuenta con un pabellón cubierto de 1.250 m² e incluye una pista multideportiva, en la que se puede practicar todo tipo de disciplinas de interior. Además, también está preparado con cestas en las paredes para subdividir su extensión en dos campos, donde se pueda jugar simultáneamente al baloncesto o a versiones de esta disciplina con menos cantidad de jugadores. La inversión de la reforma asciende a más de 260.000 euros.

El lugar seguirá operativo también para los clubs locales cuando arranquen las clases el próximo curso, aunque fuera del horario escolar, según explicó la edila de Educación, Raquel Barberá.

PATIO ‘A MEDIDA’ / Por otra parte, el patio del colegio, cuyo diseño final se presentó también durante la jornada, se creó con la implicación de toda la comunidad educativa. Según Marzà, «hemos trabajado conjuntamente con profesorado y familias en este proyecto de recreo coeducativo con árboles y espacios para fomentar el juego desde un punto de vista igualitario e inclusivo».

La sede educativa contará con amplias zonas verdes, tanto en el área de Infantil, como en el de Primaria. Los jardines incluirán un algarrobal, almendros, olivos y árboles frutales que proporcionarán numerosos puntos de sombra, así como pérgolas con madera que se podrán usar como laboratorio o biblioteca al aire libre. Y es que la construcción del Regina Violant cuenta con un presupuesto de 5,4 millones de euros.

En el acto participó también el director general de Infraestructuras Educativas, Víctor Garcia, el director territorial de Educación, Alfred Remolar, y parte de la comunidad educativa del centro. Por otro lado, como ha podido saber Mediterráneo, existe malestar en el consistorio al no recibir invitación a la cita, pese a que la dirección y diseño de la obra recae en técnicos municipales.