La organización del FIB devolvió ayer el millar de abonos vendidos a los vecinos empadronados en Benicàssim el pasado 3 de diciembre a precio especial. Debido a la cancelación por la pandemia del coronavirus de la próxima edición del festival internacional, que debía celebrarse del 16 al 19 de julio, los responsables del certamen habían convocado a los benicenses en el día de ayer para llevar a cabo el reembolso de las entradas en el pabellón municipal Torre Sant Vicent.

La jornada transcurrió con total normalidad y las máximas garantías de seguridad, puesto que se tomaron medidas de prevención como la medición de la temperatura a todos los que accedieron al recinto, y en todo momento se controló el aforo. Solo permitieron el paso de cinco personas a la vez para ser atendidas en las mesas habilitadas.

Además, se colocaron dispensadores de gel en la entrada y se veló por que las personas que aguardaron la cola cumplieran con la distancia interpersonal recomendada. De todos modos, la jornada transcurrió sin aglomeraciones y apenas hubo una corta cola en la apertura, a las 10.00 horas. Después, fueron llegando poco a poco al espacio y canjeando su abono por el dinero, tras entregar los documentos requeridos. Además, tanto los trabajadores como todos los vecinos llevaron puestas mascarillas.

Esta era la primera edición del FIB gestionada por The Music Republic, la misma empresa que gestiona el Arenal Sound de Burriana, tras coger las riendas del festival indie de Benicàssim. Estas primeras entradas para los cuatro días del certamen se habían lanzado al precio de unos 50 euros. De igual modo que la venta de estos abonos especiales se había realizado de forma física, la devolución también fue presencial.

La organización del FIB llevó a cabo esta jornada de reembolso junto con sus socios tecnológicos, Witrac y Red Blanca, con los que desplegaron este sistema completo de seguridad, control e higiene para las personas que se acercaron hasta el polideportivo municipal. Con estas soluciones se consigue digitalizar y controlar a tiempo real y de forma eficiente este tipo de jornadas.

El FIB anunció su cancelación el pasado mes explicando, a través de un comunicado, que «la situación excepcional de emergencia mundial por el covid-19» hacía «inviable la celebración de un festival de estas características por varios motivos», como «la salud de artistas, trabajadores y asistentes». También ante la «imposibilidad de iniciar las labores de montaje en los próximos días, tal y como estaba previsto». Además, un alto porcentaje del público y de los artistas participantes es internacional, proveniente de multitud de países.