El mercado dominical deja sin puesto a 82 vendedores

En total, se han adjudicado 220 puestos con una ocupación de entre 12 y 24 metros cuadrados. Mientras, hasta 82 vendedores se han quedado fuera y están en lista de espera. Se trata de unas cifras que muestran el interés generado por acudir a montar paradas de venta en primera línea de playa, pese a que hace más de un año que no se celebra este mercadillo y de que hay una alternativa a pocos kilómetros, en Mascarell, en el mismo día y hora.

La edila del área, Inma Carda, confirmó estos extremos y también que la tramitación para la puesta en marcha del mercado está llegando a su fin, aunque no quiso aventurar todavía ninguna fecha para su apertura. “Aún quedan algunos detalles que para nosotros son importantes y hay que resolver”, señaló la concejala del área. Aun así, todo apunta, debido al avance de la tramitación, que pueda empezar a funcionar antes de que finalice el año.

IMPACTO AMBIENTAL // Lo que sí que se tiene claro es el objetivo de minimizar al máximo el impacto medioambiental que ocasionaban los desperdicios generados por esta actividad, en especial, la acumulación de bolsas de plástico, que incluso el viento arrastraba hasta el mismo mar. “Vamos a atacar este problema de dos maneras, tanto por lo que respecta a los vendedores como en lo referente a los compradores, porque el objetivo es que este plástico no se quede esparcido por el suelo y que el viento lo lleve hasta la orilla”, puntualizó la edila.

SEÑALIZACIÓN // Por otra parte, esta semana se prevé el pintado, en la explanada del antiguo Mercaplaya, de las líneas que delimitarán las calles y los puestos que darán forma al mercadillo.

Un recinto que se montó por última vez a finales de junio del 2015. Con la llegada del verano y como era habitual, se trasladó a la playa de Almassora, pero después ya no volvió a reanudar su actividad en Burriana, ya que el contrato venció y el equipo de gobierno no renovó con Mercaplaya. H