Miles de personas abarrotaron el litoral de la playa de Moncofa para participar en el tradicional desembarco de la imagen de la patrona, Santa María Magdalena. Una fiesta declarada de Interés Turístico Provincial. Como ocurre todos los años, las personas encargadas de llevar el anda se trasladaron hasta el puerto de Burriana, para acompañar a la figura. Allí se emprendió un emotivo viaje, con rumbo hasta la costa moncofense, junto a varias embarcaciones.

Durante todo el trayecto, especialmente a medida que se acercaban hasta el destino, los jóvenes marineros fueron lanzando cohetes, en señal de que la santa ya estaba en camino. Cuando se empezó a visualizar la nave, fue subiendo la emoción de los asistentes. Pero el momento cumbre se produjo cuando María Magdalena fue bajada por los marineros. Junto a ellos, mucha gente quiso tocarla y mojarla, a la vez que fue balanceada, en señal de que ya estaba en su localidad.

Ya en tierra firme, la imagen obtuvo los aplausos de los asistentes, congregados en la zona centro de la costa. Los navegantes transportaron a hombros a la santa, hacia un escenario donde tres niñas le dedicaron unos versos. Transcurrido el recibimiento oficial, se emprendió la procesión hasta la ermita. La pirotecnia estuvo también presente, con el lanzamiento de una batería de carcasas en señal de su llegada.

En este día grande no faltaron las autoridades, con la corporación local al completo; religiosas y festivas, encabezadas por la reina actual, Rebeca Alemany.

RECONOCIMIENTO

Otro de los actos relevantes de la jornada de ayer fue el sentido reconocimiento a las vecinas del municipio que llevan el nombre de la patrona. El pasacalle recorrió el casco urbano para recoger a la de mayor edad y a la más joven. Después, la comitiva se encaminó a la plaza de la Constitución, donde actuó el Grup de Danses Biniesma.