Morella ha hecho balance tras el temporal de nieve y ha cifrado las pérdidas en 700.000 euros entre los daños causados a bienes públicos y privados. De los relativos al patrimonio municipal, figuran varios derrumbamientos de muros y problemas en los accesos a caminos, afecciones al patrimonio monumental, caídas de farolas y cableado del alumbrado y averías en sistema de bombeo, con una primera valoración global que alcanza los 220.000 euros.

Por su parte, los vecinos han dado cuenta de 37 incidencias. La mayor parte de ellas corresponde a las explotaciones ganaderas, con 350.000 euros, además de cuatro siniestros en industrias y comercios y tres en viviendas, que ascienden a 98.000 euros. No obstante, esta cifra podría verse incrementada en los próximos días, debido a la dificultad todavía para acceder a algunas de las parcelas.

El alcalde de Morella, Rhamsés Ripollés, asegura que «todas las administraciones tienen que estar junto a las personas que han sufrido los efectos del temporal, puesto que son vecinos que trabajan día a día por el sostenimiento de nuestro medio». El primer edil traslada también que «hay que ser conscientes de que estas primeras valoraciones crecerán en los próximos días», a causa de la situación en que se encuentra la localidad y por no poder acceder aún a muchos lugares.

Morella solo es uno de los municipios del interior que sigue lidiando con los efectos del temporal. Ares, Vilafranca o Culla son otras de las localidades en las que Gloria aún sigue bien presente.