Un nuevo ejemplar de calderón apareció ayer por la mañana en la playa del Grao de Burriana percatándose de ello un bañista, quien alertó de la presencia del animal a unos 30 metros de la orilla. A partir de ahí, los miembros de Salvamento Marítimo y de Cruz Roja se desplazaron hasta el lugar para intentar mantenerlo en el interior del agua y que no llegase a la orilla, donde no se hubiera podido hacer nada por mejorar su estado.

Varios bañistas que se encontraban en la zona y el concejal de Poblados Marítimos, Vicent Aparisi, colaboraron en esas primeras labores de mantenimiento del ejemplar en el agua. Con la llegada de los biólogos y trabajadores del Oceanogràfic de València tuvo lugar una larga sesión de prácticamente dos horas, en la que intentaron reanimar y estabilizar al delfín sin que, definitivamente, pudieran hacer nada para salvar su vida.

Se trataba de un pequeño calderón de entre 40 y 50 kilos de peso, que se suma a los dos ejemplares que en junio también aparecieron en la misma zona de la playa del Grao.

El ejemplar fue trasladado a las instalaciones del Oceanogràfic, donde intentarán esclarecer las causas de la muerte. Pese al desenlace, varios vecinos agradecían y felicitaban a los rescatadores del calderón. H