La Vilavella se encuentra en la recta final de Festa la Vila y ayer por la noche se congregaron cerca de 1.200 peñistas y vecinos en la gran barbacoa que elaboró el chef Becerra con embutido de las carnicerías de la localidad.

El nuevo espacio multiusos fue el punto de encuentro para este evento gastronómico, organizado por el Ayuntamiento y Mediterráneo, y que contó con una amplia representación de la corporación, encabezada por el alcalde, Manel Martínez, y el edil de Fiestas, Domingo Rodríguez.

Durante el acto, Rodríguez señaló que «es de agradecer la gran cantidad de asistentes que han contado todos los actos, incluso en las jornadas donde la climatología no ha sido muy benévola».

Además, el alcalde añadió que «una semana de fiestas tan intensa como la que se vive en esta localidad, siempre te hace estar pendiente de los actos».

Por otra parte, una quincena personas boicoteó la Gynkana Show Prix Olimpus, que debería de haberse celebrado ayer a las ocho de la mañana, pero que finalmente se suspendió al no inscribirse nadie. Según Martínez, «han sido unos pocos que han querido mostrar su descontento por la eliminación del encierro que este año no se ha podido realizar porque no podríamos cumplir la normativa». En la madrugada de ayer también se produjeron actos vandálicos con la quema de dos contenedores en la zona del parque de la Vieta.