El Museu de Ceràmica de l’Alcora sigue enriqueciendo sus fondos. Si recientemente tuvo lugar la cesión en depósito del pavimento de la Comedia del Arte, propiedad del Museu del Disseny de Barcelona --de la que se hizo eco este periódico--, en esta ocasión el centro museístico ha recibido la donación de dos importantes colecciones de moldes. Han sido realizadas por los herederos de dos grandes ceramistas escultores del siglo XX, Vicente Artero Aicart y Cristóbal Carnicer Bou.
«Es un material doblemente valioso para nosotros; por una parte, para conocer mejor una fase de la historia de nuestra cerámica; por otra, porque el gesto de las respectivas familias supone un acicate y un reconocimiento a la labor del museo como garante de la preservación de nuestro patrimonio», explicó el director del centro, Eladi Grangel.
El recinto, según comentó Grangel, ya disponía de varias esculturas de ambos ceramistas, y ahora con los moldes que usaron durante su trayectoria artística se podrá documentar mejor su obra. «El trabajo de los últimos escultores merece ser reivindicado y tener un espacio en la historia de la cerámica de l’Alcora», añadió el director, quien recordó que el museo acaba el año «con un balance extraordinario de ingresos por esta vía, pues en las fiestas del Cristo ya se presentaron piezas donadas por Marisa Ripollés Nomdedéu y por Francisco Villalonga García-Petit».
