El IES Botànic Cavanilles es uno de los centros educativos más antiguos de la Vall d’Uixó desde el punto de vista arquitectónico, pero de cumplirse lo anunciado, pasará de ser la estructura más clásica a la más innovadora. Y es que, dentro del plan Edificant, se ha dado el visto bueno a una propuesta municipal que supondrá el desarrollo de un proyecto constructivo «piloto e innovador», como defendió la todavía concejala de Educación, Carmen García.
Hace algunos meses se confirmaba que la Conselleria había aceptado la delegación de competencias para llevar a cabo una reforma del Botànic, aunque en primera instancia se trataba de conservar la estructura exterior y reformarlo de forma integral en su interior, precisamente porque se trataba de una distribución antigua y obsoleta. Sin embargo, el consistorio tenía otros planes.
NEGOCIACIONES TÉCNICAS / Tras mantener diversas reuniones con los responsables provinciales y autonómicos de Educación, y de plantear los criterios que se pretendían implantar, recientemente se logró el objetivo: proceder a la demolición total del actual inmueble y plantear su reconstrucción «siguiendo unos criterios nórdicos», según García.
La propuesta pasa por «descartar la estructura clásica de largos pasillos a través de los cuales se distribuyen las aulas, todo muy compartimentado» para proponer espacios más diáfanos, que contribuyan a desarrollar un modelo educativo innovador, lo que llevará, necesariamente, a cambiar los modelos de enseñanza implantados hasta el momento.
El Botànic Cavanilles pasará así de ser un edificio en cuya fachada lucía uno de los últimos símbolos franquistas de la ciudad, a convertirse en una instalación moderna y abierta, tanto en el exterior, como en su interior.
La reforma solo afectará a la estructura central, dado que los talleres se construyeron recientemente. Aunque no hay plazos ni presupuesto ni un proyecto definitivo redactado, esta es una de las 25 obras presentadas por el Ayuntamiento, que la Conselleria de Educación ya ha aprobado.
Además de este, la Vall tiene otros dos institutos: el Honori, renovado en el 2017; y el Benigasló, que data del año 2004.
