La Vilavella se esfuerza por volver a la normalidad institucional, pero tras la convocatoria de un nuevo pleno ordinario se recupera la incertidumbre de si la sesión podrá desarrollarse sin sobresaltos. La principal incógnita, en este caso, será saber si el exalcalde y todavía concejal, Manel Martínez, acudirá estar tarde al ayuntamiento para ocupar su lugar en el lado del PSPV.

En la línea que viene caracterizando su relación con la esfera pública desde el día de su dimisión, Martínez no se ha manifestado al respecto, por lo que tan noticiable sería que acudiera al pleno como que persistiera en su postura y no lo hiciera, con lo que la duda sobre si pretende o no dimitir de su cargo sigue a día de hoy en el aire.

En cuanto al contenido, el de mañana pretende ser un pleno de puro trámite, con la aprobación de los días festivos locales para el 2020, la posibilidad de sacar a licitación la gestión del bar de la Cantera en la zona deportiva o la adhesión a la Asociación para la Diferenciación y Calidad de la Clemenules de la Plana, aunque no se puede descartar que en algún momento salga a relucir el tema más polémico de los últimos días, el desplome de dos toros en Festa la Vila y la consiguiente denuncia del PSPV ante la Guardia Civil.