Las obras del carril lúdico a la ermita que Vinaròs adjudicó en dos lotes con la finalidad de poder avanzar más en su conclusión se encuentran en un estado muy dispar. Mientras los trabajos del primero están avanzados, con la construcción del nuevo puente sobre el río Cervol iniciado, en el caso del segundo las tareas todavía no han arrancado.

La pasarela sustituye la antigua infraestructura de la vía ferroviaria, que, tras su desuso, se utilizó para tráfico rodado y fue derruida hace unos meses. Este antiguo eje podía causar inundaciones en caso de fuertes lluvias, de ahí la necesidad de reemplazarlo. El edil de Ordenación del Territorio, Jan Valls, informó de que, tras concluir la fase de cimentación, están adelantando el tablero de la plataforma y las obras finalizarán durante la primera quincena de mayo.

El nuevo vial estará alineado con el camí Sant Gregori y en cada uno de los extremos construirán dos rotondas para facilitar el acceso de los vehículos a los diferentes caminos, que comunican la zona industrial de la N-238 con la avenida Gil de Atrocillo.

El primer lote tenía un presupuesto de licitación de 950.000 euros, pero se contrató por 726.489,30 euros a la UTE de Edifesa Obras y Proyectos SA y Construcciones y Obras Llorente SA. Las obras afectan al tramo que va desde el llamado puente romano hasta el cruce de los Dos Vilars.

Este avance choca con el retraso de las del segundo, que salía por 1,2 millones y se adjudicó por 776.238,41 euros a Tecyr Construcciones y Reparaciones SA, pero no se ha iniciado.