La Concejalía de Medio Ambiente de Peñíscola comenzará en los próximos días la aplicación de tratamientos para evitar la proliferación de la procesionaria en los pinos situados en las calles y zonas urbanas del municipio.

Durante el pasado marzo, un total de 60 ejemplares del casco urbano fueron objeto de trabajos, justo en el momento en el que las orugas comienzan a descender desde los ovillos situados en la copa de los árboles.

El edil encargado de este área, Alfonso López, indica que el nuevo operativo «será similar al utilizado el pasado año, que dio buenos resultados y que consiste en la aplicación de inyecciones».

Con este sistema de endoterapia introducen productos fitosanitarios con el objetivo de evitar la presencia de bolsas de procesionaria en las copas de los pinos. La elección de este tratamiento obedece a la ausencia de productos químicos en el ambiente y la inocuidad para los ciudadanos, por lo que se puede realizar en cualquier momento de la jornada sin que suponga un peligro para la salud de personas.

En la primavera del 2015 se dio una considerable plaga de orugas en los pinos, por lo que decidieron llevar a cabo medidas preventivas. «En nuestro caso, hemos logrado que en los últimos meses no hayamos tenido constancia de molestias», añade el concejal. Además, la futura contrata del servicio municipal de jardinería incorporará estas acciones.