La reclamación en vía administrativa que el Ayuntamiento de Nules pretende aprobar en el pleno del mes de abril para reclamar daños y perjuicios por la regresión marina provocada por el puerto de Burriana no solo apunta a la Generalitat, también al consistorio vecino. Así lo confirmó ayer la asesoría legal contratada por Nules. Y es así porque la Generalitat «es titular del puerto» y el Ayuntamiento «lo es de la concesión para su gestión», detallaron.

Como avanzó Mediterráneo, el equipo de gobierno no solo ha buscado asesoramiento legal para lograr una compensación por el impacto de la regresión en la playa. De manera paralela, solicitaron un informe económico que cuantifica en más de 30 millones de euros los daños directos ocasionados a la localidad desde que, «en los años 60, se construyeron unas escolleras en el puerto para retener la arena», que tuvieron un impacto directo en la pérdida de litoral al sur.

Así lo demostraría el informe encargado al catedrático José Serra, a quien se le pidió que «buscara la causa real de la regresión de la playa de Nules», especifica el alcalde, David García.

RESPONSABILIDADES CLARAS / Este estudio, «muy completo y detallado», apuntaría de manera inequívoca que «la causa principal fue la ejecución del puerto y la no defensa entonces de la costa nulense», lo que se considera «una obligación de la administración cuando ejecuta una infraestructura de esta envergadura».

El trabajo incluye «numerosas fotografías aéreas que evidencian cómo el mar ha ido comiéndose el litoral que hay entre Nules y Burriana», con especial incidencia en la zona en la que limitan los dos términos municipales y en la más próxima a Moncofa.

La cuantificación económica de esos daños la ha realizado un gabinete especializado que ha tenido en cuenta, por ejemplo, según García, «todo el terreno que el mar ha hecho desaparecer y que estaba tipificado como rústico y, por lo tanto, pagaba IBI y ya no está»; o el suelo que en el PGOU estaba marcado como urbano, con PAI proyectados, que ya no está disponible. A su vez, han valorado el impacto que esta pérdida de playa ha tenido en el turismo, atendiendo a la realidad de los municipios vecinos.