El Ayuntamiento de Nules se ha visto obligado a planificar tratamientos intensivos contra la presencia de mosquitos, tal y como sucediera a mediados de junio, después de detectar una eclosión extraordinaria de estos insectos en el conjunto de la población, como confirmó ayer el edil de Sanidad, Antoni Romero.
Los primeros avisos llegaron el fin de semana y la empresa encargada del servicio de control de plagas se puso manos a la obra, aunque ya no se pudo evitar que los vecinos comenzaran a quejarse por la presencia de moquistos y, en consecuencia, por las molestas picaduras, que en algunos casos han requerido de asistencia sanitaria. De hecho, una vecina relató a Mediterráneo que fueron «a pasear por la tarde a la playa de les Marines» y se dieron cuenta de que había multitud de insectos. «Nuestra hija pequeña acabó con más de 10 picaduras», añadió. Y no es el único caso.
El edil de Sanidad afirmó ayer que es «muy consciente de las molestias que producen a la ciudadanía». «Hemos empezado a plantear la posibilidad de abrir otras vías de actuación para tratar de evitar este tipo de eclosiones, contra las que no se puede actuar hasta que se producen».
Los expertos que colaboran con el Ayuntamiento en las tareas de control y extinción destacaron que «está siendo un verano muy lluvioso y se han generado focos de difícil acceso, en especial en parcelas privadas, que han afectado de norte a sur a la provincia». De hecho, cabe recordar que el alcalde, David García, anunció sanciones para los propietarios que no realicen los preceptivos tratamientos de balsas o piscinas o no controlen la acumulación de agua en sus terrenos.
Por el momento, los técnicos de la empresa realizaron ayer por la mañana «tratamientos larvicidas en los imbornales de la vía pública en toda la playa para el control del mosquito tigre», aunque Romero asegura que los que están produciendo las molestias pertenecen a una especie distinta, propia de las zonas de marjal.
Con todo, la intención es controlar la presencia de mosquitos, independientemente de la variedad a la que pertenezcan, por lo que en estos casos «se están utilizando productos biorracionales que inhiben el crecimiento de las larvas e impiden que lleguen a adultos, porque les causa la muerte». Romero incidió en que en todo el verano no se han abandonado los tratamientos preventivos y «tras las fuertes lluvias de los últimos días, se reforzaron los que se hacen con productos larvicidas en campo», una actuación que se completará «con adulticidas a lo largo de esta semana».
