El principal acceso a la ciudad de Peñíscola, la carretera CV-141, seguirá en obras durante, al menos, los primeros compases de este verano. Tras haber decidido la paralización provisional de los trabajos, debido a las quejas por los posibles problemas que puede acarrear la instalación de una separación de doble bordillo entre los carriles, la Conselleria de Obras Públicas indica que esto «podría suponer un retraso en las labores que estaba previsto finalizar el próximo mes de junio».

La semana que viene habrá una reunión entre representantes del Ayuntamiento y la administración autonómica para encontrar una solución a este asunto que originó quejas entre los usuarios, que consideran que la barrera entre los carriles, para evitar los giros a la izquierda, creará situaciones de atascos y embotellamientos. Desde Obras Públicas, por su parte, afirman que la medida ya se tomó «en puntos como el Manyar en Monòver, Elx-Santa Pola o los Balcones de Torrevieja, con un resultado excelente».