Las obras de Villa Iluminada en Benicàssim continúan en stand by a falta de una resolución. La actuación fue paralizada por la Policía Local y el Ayuntamiento, que abrió un expediente de disciplina urbanística tras, supuestamente, haberse incumplido la normativa de protección del inmueble.

El concejal de Urbanismo, Carlos Díaz, explica que en este tipo de casos «dan traslado al Colegio de Arquitectos de que se ha infringido la legalidad» y también a la Fiscalía, por si hubieran cometido algún delito que fuera penalmente perseguible. «De momento, no sabemos nada», destaca.

El edil subraya que la reforma interior del edificio contemplaba una excavación para realizar un sótano, aprovechando la altura de la planta con escalera. Pero «al estar en mal estado, fue tocarlo y se fue abajo», detalla. En concreto, parte de la fachada que da al pasillo empezó a agrietarse, por lo que decidieron parar las obras y llamar a la policía para cerrar por seguridad el pasillo anexo. Al ver que iba a peor, optaron por derribarlo «de forma controlada», así que demolieron las paredes laterales, que estaban deterioradas.

No obstante, como la villa tiene protección ambiental y «hay que conservar la volumetría», la empresa encargada tendrá que «reconstruir esos muros tal y como estaban», dice Díaz.