La edila de Hacienda de Onda, Silvia Cerdà, hizo ayer un repaso a la reducción de la deuda desde que el alcalde, Ximo Huguet, accedió a la alcaldía. En concreto, destacó que, según indican las cifras de la tesorería municipal, prevén que en el 2017 esta no alcance los tres millones de euros.

En este sentido, recordó que el débito consistorial al finalizar el ejercicio 2015 era de 4.984.064,73 euros, mientras que al acabar el 2016 se quedó en 3.686.794,89 euros. En este sentido, afirmó que fruto «del importante esfuerzo de gestión» que han hecho año tras año, «se han conseguido rebajar los números rojos con las entidades bancarias».

Estos datos se han logrado por la amortización anual de los diferentes préstamos que el consistorio tiene y por no solicitar otros en los ejercicios 2016 y 2017, como sí se venía haciendo en años anteriores. Cerdà explicó que «el equipo de gobierno socialista hace uso del remanente para no pedir créditos, en un ejercicio de responsabilidad y buena gestión del dinero de todos los ondenses», al tiempo que avanzó que no lo van «a tramitar si no es absolutamente necesario, es decir, si el consistorio no contara con capacidad monetaria».

CAPITAL PROPIO / De esta manera, los socialistas evitan aumentar la deuda, realizando inversiones financiadas con capital propio sin recurrir a préstamos. «En dos ejercicios de legislatura hemos bajado el débito en casi 1,3 millones de euros y la previsión para el 2017 es que descienda en casi 800.000 euros más, demostrando así que se puede hacer una gestión responsable, sin dejar de realizar inversiones en la población que mejoran la calidad de vida de los ciudadanos», añadió.