El pleno del Ayuntamiento de Nules celebrado ayer por la tarde aprobó una segunda modificación de la ordenanza de vados, una reglamentación que se ha ido adaptando a los inconvenientes o lagunas que se han detectado en el texto original, que entró en vigor el año pasado.

Con la primera propuesta, el equipo de gobierno quería acabar con lo que el alcalde, David García, calificó como «un agravio comparativo», el que suponía que algunos vecinos pagaran y otros no por el mismo comportamiento: pasar con un vehículo sobre la acera para acceder a una cochera. Con la nueva normativa se obligó a todos los ciudadanos a colocar las placas y abonar la preceptiva tasa, independientemente de dónde estuviera su garaje. Con la regularización inicial se precisó que los residentes en calles peatonales no tenían la necesidad de pintar la franja amarilla que identifica la presencia de la reserva de espacio por entrada de automóviles, en especial, por cuestiones estéticas en una zona adoquinada, que se caracteriza por no contar con bordillos.

IDENTIFICAR RESPONSABLES / El texto deja muy claro que cualquier ciudadano que va por encima del bordillo para meter su vehículo en un párking que no tiene vado puede ser sancionada por ello. Y es ahí donde la Policía Local ha detectado una posible «injusticia», según señaló García.

Si un coche va a un taller, una gasolinera o un negocio cruzando una acera y no hay vado, según la norma, podía ser denunciado. Es ahí donde el equipo de gobierno ha querido incorporar el matiz. Como explicó ayer el alcalde «el responsable es el propietario del negocio y no el conductor», de ahí que se quiera especificar este caso, de manera que no queden dudas, de producirse alguna situación semejante.

García aseguró: «Hasta ahora, no se ha sancionado a nadie por este motivo». Pero es evidente que al introducir esta modificación, lo que pretende el consistorio es emplazar a los dueños de este tipo de empresas a que se acojan a la nueva normativa municipal, como el resto de vecinos del municipio y, por lo tanto, soliciten, coloquen y paguen por la reserva del espacio necesario.

En la misma sesión, salió adelante la propuesta para someter a información pública el proyecto de expropiación y ocupación para construir un colector y realizar la conexión correspondiente con la N-340 del polígono industrial La Mina. García precisó que con esta medida «queremos conseguir más suelo industrial, que permitirá a las azulejeras ampliar las fábricas o facilitará la instalación de empresas».