El Ayuntamiento de Orpesa y Facsa, responsable del servicio de abastecimiento de agua y del sistema de saneamiento y depuración de aguas residuales de la localidad, han firmado un convenio de colaboración con el objetivo de analizar la presencia de material genético de SARS-CoV-2 en las aguas residuales del municipio. Un acuerdo que se enmarca dentro del proyecto Covid Water que la empresa puso en marcha a finales de marzo y que combina sistemas de información geográfica con recursos de inteligencia artificial y análisis masivos de datos.

El proyecto tiene una duración prevista de 16 semanas, por lo que permitirá hacer un seguimiento detallado de la evolución de la epidemia por Covid-19. El análisis de datos se realiza combinando información demográfica, epidemiológica, ambiental, de movilidad y con la propia generada durante el proyecto mediante la detección de la presencia de material genético de SARS-CoV-2 .

La alcaldesa de la localidad, María Jiménez, ha explicado que “la información que obtengamos de los análisis nos permitirá detectar la posible presencia de personas infectadas por el virus, independientemente de que manifiesten síntomas o no”. Por ello, uno de los objetivos “es realizar un seguimiento de los niveles de carga vírica en las aguas residuales”, ha añadido la primera edil. Desde Facsa esperan “poder contribuir a mejorar la prevención de futuros rebrotes y colaborar en la aportación de indicadores que faciliten la toma de decisiones de medidas que han demostrado ser eficaces para frenar la expansión del virus”.